COPENHAGUE — La cooperación entre los países nórdicos y los países bálticos es hoy en día “más profunda que en cualquier otro momento de los tiempos modernos” ante las amenazas crecientes de Rusia tras su invasión de Ucrania, declaró el lunes el primer ministro sueco Ulf Kristersson.
Kristersson recibe el lunes al canciller alemán Olaf Scholtz y a los primeros ministros de los países nórdicos en Estocolmo. Al mismo tiempo, las primeras ministras de los tres países bálticos, reunidas en la capital de Lituania, Vilna, señalaron que la intimidación de Moscú no les inhibirá de apoyar a Ucrania.
”Durante décadas hemos vivido de manera muy pacífica y sin grandes amenazas para Europa. Personalmente, creo que estos tiempos ya pasaron”, afirmó la primera ministra danesa Mette Frederiksen, según la emisora danesa DR. “Con todo lo que vemos del lado ruso, estamos al comienzo de una nueva era. Sería un error si nosotros, como gobierno, dijéramos que no es necesario lidiar con esto en la vida diaria”.
Kristersson dijo que las políticas de seguridad y la inminente cumbre de la OTAN en Washington en julio encabezarán la agenda de la reunión con Scholz y los primeros ministros de Dinamarca, Noruega, Finlandia e Islandia.
“Desde hace mucho hemos apreciado a nuestros vecinos, pero al mismo tiempo subestimamos la importancia de una cooperación concreta y operativa”, escribió Kristersson en un artículo de opinión publicado por el diario financiero sueco Dagens Industri. “Si quieres cooperar bien, tienes que reunirte, conocer a los demás y buscar alianzas comunes más amplias, tanto en la OTAN como en la UE”.
Suecia se unió a la OTAN en marzo y Finlandia lo hizo en abril de 2023. La expansión de la OTAN fue un duro revés para el presidente ruso Vladímir Putin con un histórico realineamiento de la estrategia de seguridad europea post-Guerra Fría provocado por la invasión rusa de Ucrania.
El Mar Báltico está ahora casi totalmente rodeado por países de la OTAN, fortaleciendo la alianza en esa región estratégicamente importante. Incluye acceso marítimo a la ciudad rusa de San Petersburgo y al enclave de Kaliningrado.
El jefe de gobierno sueco dijo que en las semanas recientes había tenido reuniones con sus pares regionales para “discutir temas que son importantes tanto para ellos como para Suecia: defensa, bosques, clima, migración, delincuencia y las amenazas de Rusia”.
En Vilna, la primera ministra lituana Ingrida Šimonytė recibió a sus homólogas de Estonia, Kaja Kallas, y de Letonia, Evika Siliņa, para una reunión del Consejo de Ministros del Báltico.
Kallas dafirmó ijo que “Rusia también ha intensificado su guerra clandestina contra todos los países europeos. Desea realmente asustarnos e intimidar al mundo libre para que no ayudemos a Ucrania”.
“No debemos tener miedo”, añadió.
Los tres países bálticos han sido férreos partidarios de Ucrania.
“Rusia debe perder la guerra, por el bien de Ucrania, de la seguridad europea y del orden mundial”, dijo por su parte Siliņa. “Debemos recordar que estamos viviendo en una Europa en medio de la guerra. Es una guerra que está perturbando a las sociedades de Europa. Es una guerra que está ampliándose aquí, en nuestro vecindario”.